Josefina Carabias (dcha.) junto a Maruja Mallo, apoyadas sobre su Antro de fósiles, Madrid, 1931.
«Desde los tiempos más remotos hasta finales del siglo XIX, la humanidad femenina se dividía en dos grandes grupos, a saber: 1º Mujeres que se casaban; 2º Mujeres que se quedaban solteras. Las que por su desgracia pertenecían a este segundo grupo, recibían la denominación de solteronas, y sus soluciones eran las siguientes: A. Meterse monjas; B. Poner un estanco». Así comienza Josefina Carabias el informativo, comprometido y, a la vez, divertido reportaje en el que describe la conquista de la universidad por la mujer. Es 1933 y el desembarco había tenido pioneras –Elisabeth Blackwell, María Goyri…– y, en aquellos años de la República, un impulso definitivo en el que tuvo mucho que ver la Residencia de Señoritas. Dirigida por otra pionera, María de Maeztu, allí fue residente la propia periodista. Lee aquel relato publicado en Estampa y descubre más sobre Josefina Carabias y la historia de las Mujeres en vanguardia.
JOSEFINA CARABIAS VISTA POR…
Adolfo García Ortega, Fernando Morán y Carmen Rico Godoy
Extractos de la presentación de su libro
Como yo los he visto. Encuentros con Valle Inclán, Unamuno,
Marañón, Pastora Imperio, Ramiro de Maeztu y Belmonte
Residencia de Estudiantes, 8 de marzo de 1999